Antonio López Garcia. Fotografía de la naturaleza.

Antonio López Garcia. Fotografía de la naturaleza.
Buscando amigos

viernes, 4 de mayo de 2012

Libre

Libre, salvaje y puro, como la helada y etérea niebla de la mañana que baña a su paso las verticales e inaccesibles paredes rocosas  de este exclusivo e idílico reducto Asturiano donde aun es posible contemplar en total libertad a estos colosos del reino animal, cuya sola presencia arranca de lo más profundo de nuestra Alma ese hálito de ilusión y de esperanza que nos devuelve la alegría de vivir.

El poderoso macho ventea el aire en busca de los efluvios de la hembra en celo que sin duda no anda lejos, o tal vez sigue el rastro de la que amamantando aun a su joven retoño del año anterior, huye y se esconde en los lugares mas impensables e inexpugnables, en un desesperado intento de proteger a su vulnerable cría de las iras reproductivas de este soberbio animal.

Con paso lento, pero seguro y constante, casi demoledor, va cubriendo la enorme y extraplomada distancia que media desde la cumbre por donde apareció hasta el profundo valle por donde discurre un embravecido río, y vuelta de nuevo hacia arriba por otro lado de la escarpada montaña, donde  una joven hembra  observa recelosa desde lo mas alto su errático e intimidante peregrinar.

Cuesta trabajo separar la vista a través de la cámara, de esta enorme bestia negra,  y es cuando por fin te decides a hacerlo, cuando realmente aprecias el trayecto recorrido en tan corto espacio de tiempo, en tan abrupta y dificultosa orografía. Perdido por unos instantes entre la vegetación próxima a la cumbre que ha alcanzado nuevamente con facilidad pasmosa, advertimos su probable ubicación, por la actitud de alarma de la hembra que lo observaba, y por su precipitada huida, no tardando en aparecer por ese mismo lugar el voluminoso macho, volviendo a desaparecer tras de la peluda y deseada fémina.

 Peregrinaje tras el rastro de una hembra.
Observa con detenimiento a donde quiere llegar, y por donde ir.

 Lento pero con innegable determinación inicia su camino.

 Se detiene con frecuencia para analizar el aire, y sigue su camino aparentemente errático, pero con clara determinación.

 En ningún momento del trayecto seguido muestra la más mínima dificultad en superar cualquier obstáculo, por vertical e infranqueable que se le pueda presentar.

 Sigue una ruta zigzagueante pero sin titubeos, posiblemente trazada a su paso por la reciente presencia de una hembra.

 Me cuentan que a este gran macho, la hembra del lugar le anda evitando hace días, cosa que yo mismo he podido comprobar.

 Pese a la enorme distancia que nos separa, hiela la sangre pensar que el también pueda estar observándonos, lo mismo que nosotros a el.
Ciertamente esto es un "producto" dicho sea con todos mis respetos, que realmente engancha. Ya estoy contando los días para volver a intentar fotografiarle con mejor luz si es posible, y disfrutar de esta tierra tan bella y hospitalaria. Muchas gracias a todos los que me habéis ayudado.
Oso pardo ibérico (Ursus arctos pyrenaicus)

1 comentario:

  1. guau menudo momentazo y encima lo fotografias solo puedo decirte que te envidio un saludo

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